O
también llamadas “lágrimas de San Lorenzo”, por ser el día de
este santo el 10 de Agosto.
Pero
¿qué son las Perseidas?, pues simplemente una lluvia de estrellas,
aunque no la mayor que hay a lo largo del año pero sí la más
popular.
En las
noches de verano es espectacular si tenemos algo de paciencia, ver en
el hemisferio Norte una auténtica lluvia de partículas de polvo,
algunas de un tamaño no mayor al de un grano de arena. Estas
partículas llamadas meteoroides están producidas por el cometa
Swift_Tuttle que gira alrededor del Sol durando su órbita 133 años.
Nuestro planeta al cruzar en su órbita la cola del cometa en estas
fechas hace que los meteoroides choquen contra la atmósfera y esa es
la luz brillante que vemos en nuestros cielos.
Como
he dicho al principio a lo largo del año se producen varias,
recibiendo cada una el nombre de la constelación de la cual parecen
proceder; a esto se le llama radiante, y en el caso de la que nos
ocupa ahora, las Perseidas, el radiante está en localizado en la
constelación de Perseo.
Hay
una bonita leyenda de la mitología griega acerca de este semidios
hijo de Zeus y de Dánae pero la contaré en una próxima entrada, os
gustará seguro, es muy hermosa; sólo comentaré que Zeus se
transformó en lluvia dorada para poder poseer a Dánae, de ahí
deriva el nombre de “lluvia de estrellas”, pero mientras
disfrutemos mirando al cielo y, cuando veamos alguna pedir un deseo,
seguro que alguno se cumplirá.
Me hubiera gustado ver alguna pero no ha sido posible, otra vez será.
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